Colchón blando y dolor de espalda

Tenemos que deciros algo: hemos sido engañados. Vosotros, nosotros y toda la humanidad. Nos han hecho creer, desde pequeños, que los colchones blandos eran símbolo de comodidad usando representaciones gráficas como personajes de dibujos animados durmiendo en una nube. Por el contrario, la dureza es lo que menos asociamos a la comodidad y confort. Hoy vamos a hablar de un tema por el que nos preguntáis mucho: ¿qué es mejor, un colchón duro o blando? 

Está claro: nuestra espalda no es como la de Piolín o la de cualquier dibujo animado que sueña con dormir cómodamente en una nube. Nuestra espalda tiene una columna vertebral. Si nos pusiéramos las gafas de rayos X (o viéramos cómo a alguien le parte un rayo) entenderíamos mucho más sobre esta estructura que principalmente soporta nuestro esqueleto: desde atrás debería estar perfectamente recta, sin curvas laterales. En cambio, si la miráramos desde el costado, debería haber curvas hacia adentro en los niveles cervical y lumbar y una curva hacia afuera en el nivel torácico. Si tenemos clara esta información, entenderemos por qué un colchón blando nos puede dar dolor de espalda. 

Efectos de un colchón blando sobre nuestra espalda

Un colchón demasiado blando va a hacer que nuestro cuerpo se hunda y nuestra columna vertebral se arquee, provocando dolores vertebrales y de lumbar. ¿En qué casos puede ser una buena elección un colchón blando, entonces?

Un colchón de firmeza baja será recomendable para personas de poco peso, como los niños. Otro factor que hay que tener en cuenta a la hora de elegir colchón es la posición del durmiente: solo en caso de dormir de lado, un colchón blando es una buena elección. El motivo es que en esta posición hay dos puntos de presión, los hombros y las caderas, en los que un colchón duro ejercería todavía más presión, por lo que podría resultar muy incómodo. En conclusión, si pesas menos de 60 kgs y duermes de lado, un colchón blando como el Jack Legend es el ideal para ti. 

El mejor colchón para espalda y cervicales

Como os hemos contado, un colchón demasiado blando puede ser perjudicial para las cervicales y puede producir dolor de espalda, sobre todo en casos de dolencias como la escoliosis lumbar o de mayor fragilidad en los huesos como es el caso de las personas mayores. De la misma manera que un colchón demasiado blando no es bueno para la espalda, un colchón muy duro puede ejercer demasiada presión en nuestro cuerpo, resultarnos incómodo y provocar una postura antinatural para la espalda que a la larga podría generar problemas sobre todo a las personas que duermen de lado.

¿Sabes en qué casos un colchón duro es el mejor colchón para la espalda y cervicales? Pues en el caso de personas de mayor peso, por ejemplo.

Y si estas duermen boca arriba, es todavía más alta la firmeza que necesitan, ya que esta posición requiere apoyo en la columna vertebral y en la parte lumbar. De manera parecida, si se duerme boca abajo, el punto de apoyo es la cadera y también requiere de un colchón duro. Para estos casos solemos recomendar el Jack Zero, un colchón viscoelástico hecho con tejidos naturales y sostenibles, o el Jack Sport (de firmeza Hard), diseñado para cuidar de la columna vertebral de personas corpulentas.

Entonces, en mi caso ¿qué es mejor, un colchón duro o blando?

Pues te lo vamos a poner muy fácil. Según las dos variables que hemos comentado que hay que tener en cuenta a la hora de elegir un colchón, el peso y la posición del durmiente, vamos a hacer una tabla que te acabará de aclarar cuál es la dureza ideal en tu caso:

Esperamos que te sea de utilidad y recuerda: si el rango que te indica nuestra supertabla te parece todavía demasiado amplio, no dudes en contactar con nosotros a través de nuestro chat online y uno de nuestros expertos te hará una buena recomendación de colchón para el dolor de espalda o para tu caso. 🙂