¿Te despiertas en invierno sintiendo que el frío se ha colado en tu cama? Aunque uses mantas y ropa térmica, si tu colchón no está diseñado para mantener una temperatura óptima, puede ser el culpable de tus noches heladas. Elegir un colchón adecuado puede marcar la diferencia entre pasar la noche tiritando o disfrutar de un descanso cálido y reparador. Además, la posición en la que duermes también juega un papel clave. Si siempre tienes frío al dormir, elegir colchones adecuados para el frío puede marcar la diferencia en tu descanso. Aquí te explicamos cómo encontrar el adecuado.
¿Por qué es importante elegir colchones para el frío?
La sensación de frío durante el sueño puede depender de varios factores. Algunas personas tienen un metabolismo más lento o una circulación menos eficiente, lo que dificulta que el cuerpo genere y mantenga calor. También influye la temperatura de la habitación, el tipo de ropa de cama y, por supuesto, las propiedades del colchón.
Un colchón que no aísle correctamente o que tenga materiales con baja retención térmica puede acentuar esta sensación de frío, ya que no devuelve el calor corporal al usuario. Esto es especialmente importante para quienes duermen en ambientes fríos o tienden a ser más frioleros por naturaleza.
Propiedades de un colchón para el frío
Elegir un colchón adecuado es crucial si siempre tienes frío. A continuación, te contamos qué características debes priorizar al buscar colchones para el frío:
1. Materiales ideales en colchones para el frío
No todos los materiales reaccionan igual al frío. Los colchones de viscoelástica o látex son excelentes opciones porque tienden a adaptarse a la temperatura corporal, proporcionando una sensación envolvente y cálida. Además, estos materiales evitan que el frío de la base o del ambiente se transfiera al durmiente.
Por otro lado, intenta que la primera capa del colchón lleve tejido de Tencel. El Tencel es un tejido termorregulador natural que se adapta a la temperatura de tu cuerpo, mantiene el calor cuando lo necesitas y evita que te congeles.
2. Capas de confort y acolchado
Los colchones con capas gruesas de acolchado ofrecen una barrera adicional entre tu cuerpo y el frío. Busca modelos con tejidos térmicos o acolchados especiales diseñados para mantener el calor, como aquellos con tratamiento Outlast, que regula la temperatura de forma inteligente.
3. Transpirabilidad equilibrada
Aunque pueda parecer contradictorio, un colchón demasiado aislante puede causar sudoración nocturna, lo que al enfriarse empeora la sensación térmica. Lo ideal es un colchón que combine retención de calor con una transpirabilidad moderada, permitiendo que el aire circule lo justo para mantenerte cómodo.
4. Firmeza adecuada
La firmeza también influye en la sensación térmica. Un colchón demasiado firme crea menos contacto entre tu cuerpo y la superficie, lo que dificulta la retención del calor. Opta por firmezas intermedias que se adapten al contorno de tu cuerpo sin ser excesivamente duras.
La posición para dormir contra el frío: Encuentra la mejor forma de descansar
La forma en que te acuestas también puede ayudarte a conservar el calor corporal durante la noche. Aquí tienes las mejores opciones:
1. Posición fetal
Esta es una de las posiciones más cálidas. Al encoger las piernas hacia el pecho, reduces la superficie de tu cuerpo expuesta al aire, ayudando a mantener el calor generado por tu núcleo corporal. Es ideal para personas que duermen solas, ya que también limita la pérdida de calor hacia zonas frías del colchón.
2. Dormir de lado con mantas ajustadas
Dormir de lado permite mantener una posición cómoda mientras evitas que las mantas se desplacen. Además, si usas un colchón viscoelástico, esta postura mejora la adaptación del colchón al cuerpo, potenciando su efecto térmico.
3. Evitar dormir boca abajo
Aunque no es una posición mala en general, dormir boca abajo expone gran parte de tu cuerpo al colchón, lo que puede resultar más frío si este no tiene propiedades térmicas adecuadas.
¿Cómo los colchones para el frío pueden mejorar tu descanso?
Con tantas opciones en el mercado, encontrar el colchón ideal puede parecer complicado. Aquí tienes un resumen rápido para facilitar tu decisión:
- Viscoelástica o látex: Busca modelos con estos materiales para mayor retención térmica.
- Tejidos específicos: Opta por colchones con fundas térmicas o tecnologías Tencel y Outlast.
- Capas extra de confort: Acolchados gruesos y adaptativos son ideales.
- Consulta con nuestros expertos: En tiendas especializadas como Jack Beds, podemos asesorarte según tus necesidades.
Si estás considerando cambiar de colchón, te invitamos a descubrir nuestra selección de colchones para el frío, pensados para ofrecerte el descanso cálido que mereces.
¿Qué más puedes hacer para dormir mejor en invierno?
Elegir el colchón correcto es fundamental, pero hay otras medidas que también pueden ayudarte a combatir el frío nocturno:
- Cubrecolchones térmicos: Añadir un protector con aislamiento térmico puede mejorar considerablemente tu confort.
- Sábanas de franela: Estos tejidos conservan mejor el calor que el algodón tradicional.
- Evitar espacios fríos: Asegúrate de que tu cama no esté cerca de ventanas o corrientes de aire.
Invierte en tu descanso para decir adiós al frío
Si siempre tienes frío al dormir, un colchón con las características adecuadas puede marcar un antes y un después en tu calidad de vida. Prioriza materiales como la viscoelástica o el látex, busca acolchados térmicos y experimenta con posiciones como la fetal para optimizar la retención de calor.
En Jack Beds, te ayudamos a encontrar el colchón perfecto para que duermas cálido y cómodo toda la noche. Explora nuestra selección y déjate asesorar por nuestros expertos. ¿A qué esperas para disfrutar del descanso que mereces, sin importar el frío?