¿Eres de esas personas que necesita dormir abrazada a una almohada? Es posible que alguna vez hayas oído que la forma en que dormimos puede ser un claro indicio de cómo es nuestra personalidad… Pues bien, déjanos decirte que dormir abrazado a una almohada no sólo tiene significado, sino que también tiene algunos beneficios muy interesantes. Por si te picaba la curiosidad, hoy conocerás el significado y los beneficios de dormir abrazado a una almohada 😉
Significado de dormir abrazado a una almohada
Empecemos por la principal duda que puedes estar experimentando ahora mismo… ¿Dormir abrazado a una almohada realmente tiene algún tipo de significado? Como ya te hemos comentado, la respuesta es sí. ¿Pero cuál?
Se trata de una acción que causa sensación de seguridad y por ello, además de por la comodidad que nos aporta, nos facilita la conciliación del sueño. La respuesta de tu cuerpo al descansar abrazando una almohada en la cama es muy positiva, concretamente cuando se trata de la salud mental. ¿Cuántos niños necesitan dormir abrazados a su peluche? Exacto, muchos y es por ello que desde la infancia recurrimos a este hábito sin siquiera conocer sus ventajas.
Podríamos decir que su efecto es el ofrecer confort emocional. No obstante, a pesar de que es una actividad que se practica en solitario, tiene una relación estrecha con lo social, porque se considera que representa una valoración del apego emocional de forma saludable.
Cabe destacar que dormir abrazando una almohada puede ser muy positivo para aquellas personas que sufren ansiedad o están pasando por un mal momento, ya que nos ayuda a sentir tranquilidad y confort, lo cual nos facilita la conciliación del sueño.
¿Y qué dice esto sobre tu personalidad?
A las personas que duermen en esta posición se les atribuyen algunos adjetivos desde el punto de vista psicológico, ya que se cree que son protectores y bondadosos.
En resumen, dormir abrazado a una almohada de lado significa que eres una persona con apego emocional pero de forma positiva. Se entiende que eres una persona confiada, cariñosa y empática, a la que le gusta pasar tiempo rodeada de su familia y amigos y en la cual se puede confiar.
En cambio, dormir abrazando una almohada estando boca abajo, significa que eres una persona muy honesta a la cual le gusta participar en conversaciones y dar su opinión. Te cuesta morderte la lengua y eres más de expresar tus emociones y tus pensamientos, aunque eso, a veces, pueda traerte problemas.
Y tú, ¿Te reconoces en alguna de estas definiciones? Puedes contárnoslo en nuestro Instagram.
¿Dormir abrazando una almohada tiene beneficios?
Definitivamente la respuesta es sí, empezando por el más básico de todos; entendemos que si duermes abrazado a una almohada es porque te hace sentir cómodo y te ayuda a dormir mejor. Pero, como puedes imaginarte, ¡eso no es todo! Además de la comodidad y las preferencias personales, hay otros beneficios escondidos en esta postura relacionados con nuestro bienestar físico y mental.
Evita los ronquidos
Queremos contarte un dato curioso y que probablemente desconozcas: cuando duermes abrazando una almohada, y estando de lado, los ronquidos se reducen en un 90%. ¡Así como lo lees! Lo cual es algo muy positivo para mejorar tu calidad del sueño y conseguir que tu descanso sea más placentero para ti. Y si tienes pareja, también para él o ella, ya que no la desvelarán tus ronquidos ;).
Libera la hormona de la oxitocina
Esta postura contribuye a la liberación de la hormona oxitocina, también conocida como “hormona del amor” que se genera cuando hay sensación de afecto. Esta hormona es la responsable de que mejore tu estado de ánimo, ya que los abrazos se consideran como algo “medicinal” a nivel mental para cualquier persona.
Confort y seguridad
Las personas que duermen en esta postura también consiguen que su peso se sostenga en la almohada aumentando así el confort a la hora de dormir. Además, esta sensación de confort y tranquilidad, repercute directamente en un aumento de la seguridad y el bienestar emocional en el momento de dormir.
En definitiva, abrazar la almohada es un hábito muy común y agradable que tiene beneficios para la salud mental como la sensación de seguridad y disminución de la ansiedad. Aunque, se debe tener en cuenta que también contribuye a lidiar con los ronquidos y, por lo tanto, a mejorar la calidad de nuestro descanso.